13 de abril de 2009

Pide un deseo.

Me gusta regalar deseos y dibujar cuando ya no quiero ser el otro. Cuando tengo miedo de las palabras que vuelan a mi alrededor como luciérnagas malévolas. De una o de otra manera la soledad no existe. Muchos paradigmas.


En un acercamiento sexual, mi cuerpo y el cuerpo del otro se funden en uno solo, pero este cuerpo unificado no puede ser más que interior.

·La familia fruta está destinada al hastío porque sus semillas ya no quieren germinar. Los hijos escaparán y buscarán la lluvia. 
·Misfit se refugia en los brazos del otro y cuando están muy dentro no identifican cuál es el otro para mí mismo. 
·Picassa se perdió de escena. 

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