29 de diciembre de 2009

Una cama y tantas vidas.




A veces uno piensa en las hojas en blanco y otras tantas en las sábanas. Cuantas historias, no? Cuántas vidas. A veces. Siento que en esta cama hay hogar pero también ideas. Tengo hambre y curiosidad, porque quiero devorarme el libro y no dejar de disfrutar el mágico olor de las revistas.
Nadie aquí piensa en escarabajos, solo un par de fotografías para no dejar de pensar en eso llamado futuro.
Por cierto, ya es momento de empezar el siguiente diario. Uno de recordar sueños y pensar en todo eso. Tengo hambre.

Sucede que...


No he soñado con unicornios.
Probablemente sea eso lo que pasa... estoy desconcentrada. Dispersa como el alma.
Mandarina helada en polvo.

En fin. Espero que mañana o pasado o destrabarme. ¿Alguna vez te ha pasado que un libro te estanca? No me refiero a algo filosófico, sino literal: te quedas ahí en medio de la nada (¿no que no era filosófico el asunto?) y no puedes leer porque te pesa todo, más bien es algo así como. No, ya resolví mi duda. Mejor luego regreso a él para seguir con las lecturas planeadas.

Tengo varias cosas que contar ahora que lo pienso. Muchas.
Ya quiero soñarlos.

19 de diciembre de 2009

My beloved sister.

Ella es mi orgullo, a veces no sé nada de ella, ni ella nada de mi.
Pero sabemos que estamos y que no nos abandonamos.
Mi hermana es la mejor.

Une femme est une famme.

Un día ella se topa con la película, sin saber los efectos que ésta traerá.
Sin saberlo...
Y después, se volvió a topar con Belmondo.

(Raras coincidencias, y no precisamente neoyorquinas)

17 de diciembre de 2009

En una cafetería y también aquí.


Cuantas gotas se cuentan al revés? Veinticinco minutos y las violetas están viviendo en la banqueta. A veces las olas se estacionan en los rincones más oscuros de tu cuerpo; donde no encuentro sosiego donde a veces quisiera devorarte. Existen noches y bodas... Por qué bodas?
Para darle un poco más de dulzura al verso que habla de poetas y de mares, que mastican y terminan endulzando su café con Splenda porque el Canderel le dio cancer a las rocas.

Desde mi almohada.


Vamos saltando de mi cama a mi otro mi. Aquí extraño esa manera tan tuya de acercarte cuando necesito espacio. A este mi hogar sólo le haces falta tú. El mundo, mi antiguo mundo esta en las horas de los relojes latentes de los insomnes, los emocionados; nosotros: los enamorados.

14 de diciembre de 2009

Oh my jelly bean.


Las cosas que se aprenden después de una semana de exámenes:

- Nunca agarrar la súper fiesta un día antes de entregar un trabajo final (la cruda DEVORA)
-Arriesgarse a aprender a estudiar con tu novio (si lo logras ya estás dentro) (yo lo logré).
-Conocer la biblioteca a las altas horas de la madrugada, a veces los personajes salen de los libros.
-Vivir de noche hasta que tu energía te lo permita, cuando esta se acabe detenerse totalmente y dormir.
-Intentar conservar tu individualidad hasta que no seas agresiva con los demás por tu nivel de estrés.
-Siempre buscar opciones de distracción parcial (dícese de actividades que no te distraigan TOTALmente, como una plática breve o un café a solas).
-Utilizar red bull cuando creas que definitivamente no habrá una opción diferente para sobrevivir.
-Conocer tumblr's con imágenes y frases inspiradoras.
-Google reader as a phrasal verb.
-Soñar antes que todo, después de todo.

Reír porque todo terminó.
(9.6 de promedio, estás oficialmente en cuarto semestre)

13 de diciembre de 2009

His name is tattoed in Helvetica.

Te vas a un concierto de AC/DC, yo a uno de Au revoir Simone... ¿Cuándo íbamos a conocernos?
Un día. Hola somos tan imprecisos como el 15/16 de septiembre.
Extraño tu calor.
Tus besos.
Me pongo de malas.

Me haces falta a las pocas horas de haberte dejado de ver.
Sí, soy una cursi...

8 de diciembre de 2009

Mortality is around me.


Un día quiero tener un libro de constelaciones, un telescopio.
Un cielo propio.

La mitad de mi techo se convierte en una república mexicana hecha con estrellas.

Hoy quiero ser una estrella
¿Cuánto tiempo viviría?

Hola Matilda.


A veces me hundo en la cresta ilíaca, otras nadie me verá llorar.

(me detengo en frases subrayadas de ese libro y sí un par de lágrimas no tendrían miedo de escaparse... Me he vuelto tan mujer que a veces me dan escalofríos)

7 de diciembre de 2009

Un mapa en su espalda.


Al no tener más post it flags me dedico a romper servilletas. Como si las devorara, "hola, me hice adicta al café gracias a la mística" o mejor... "buenas tardes me hice adicta al café porque tenía que soñar primero y después el mundo despertaría" no... no, NO.
"No me hice adicta a nada, más que al olor de los libros usados, a unos cuantos versos de diferentes poetas. A la voz de las mujeres que escriben. A la biblioteca que cierra a las dos de la mañana"

¿Cuándo me cansaré de este mi sueño?
Espero que nunca, espero que siempre. No. Nuevamente no quiero escapar de algo que siempre he amado.

¿y tú mujer también leíste Mujercitas y quisiste ser Jo?

Cuando empezamos... (Es pregunta y también una frase al aire)

Postdata: También me hice adicta al café gracias a una chica de cabello largo e historias enredadas en este y al sabor de mi novio después de una taza de éste.

6 de diciembre de 2009

¿Te imaginas que sólo nos quede el papel escrito con lápiz?


Courier New doble espacio, por favor.
Una cucharada y media de azúcar.
No.
Ya no me quedan palabras. Sólo el miedo a la hoja en blanco.
Mucho gusto, bienvenido.

Han pasado horas, días (sí, eso es lo más probable) sin embargo. El sueño nunca será el primero y ahorita sólo pienso en las maravillas que ofrece mi cama. Tengo un ensayo, pero les he perdido tanto el miedo, que pienso dormir y despertar mañana para hacerlo.

Juana Inés.
Me gustaría que mis ideas del papel escrito en borrones valiera más que mi ensayo. Sentimentalmente funciona mejor. Cursi (eso he sido siempre).

Voy a voler a preguntarme todo, desde las metáforas hasta las divisiones. ¿Qué tan importante es estar dormida mientras el mundo despierta... era al revés.

Siento y respiro,

5 de diciembre de 2009

Finales.


Estoy en la semana en la que contextos/libros por leer/ideas fugaces y peligros inminentes quedan en la lista de espera, en la lista de deseos...
En este momento lo que ocupa es sobrevivir mis finales, tengo cuatro trabajos (y en este momento siento que no lo lograré, pero al final siempre sucede):
-Primero sueño de Sor Juana
-Poesía mística de Santa Teresa
-Antología de paradigmas poéticos
-Análisis del ensayo "Una habitación desordenada"

Pero ya que disfruté de Guadalajara, compré libros, adelanté La muerte me da, disfruté a mi novio. Ahora sí puedo sentarme a escribir, que las tazas de café se derramen, que los relojes sigan y sigan pero que nunca se me acabe el tiempo.

Tengo ya ganas de empezar, mañana será un día largo y bonito.

No hay nada más sorprenderte que ver al calendario caerse.
De prontito.

Tus pestañas.

Hola asustado:
¿Te he dicho cuánto te amo?
Sí, millones.