Julietiiiiiiis:
Primero que nada debo aceptar que todo esto esta de la fregada. Los huracanes no son mi fuerte, y yo me imagino que de nadie, pero en especial yo me siento terriblemente frustrada cuando algo de esto pasa. ¿Por qué? Simplemente por el hecho de que en el huracán pasado al abrir la puerta después del encierro otra historia se relataba allá afuera, llena de dolor, terror, dececpción, desesperación. Y nada de eso me gusta, nada de eso rifa en lo más mínimo. Y aún recuerdo la desesperación y veo el cuchillo y como cortaban las manzanas, probablemente sea ese cuchillo y esas manzanas lo que no me dejan tranquila ni dispuesta a enfrentar nuevamente una experiencia asi. Ni siquiera el patético sonido ni el enervante olor. Pero bueno. Lo que venga que venga, yo por el momento debo dormir. DEBO.
Tequieremucho, tu hermana, pao. (sin mayúsculas)
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